Jeff Goldblum

Jeffrey Lynn Goldblum nació el 22 de octubre de 1952 en West Homestead, Pensilvania, en las afueras de Pittsburgh. Creció en una familia de origen judío con ascendencia bielorrusa y telugu; su padre, Harold L. Goldblum, era médico y su madre, Shirley S. Temeles, fue locutora de radio y empresaria. A pesar de la educación estricta, sus padres fomentaron las inquietudes artísticas en el hogar. A los 17 años, Goldblum tomó la decisión de mudarse a Nueva York para convertirse en actor, donde estudió en el renombrado Neighborhood Playhouse bajo la dirección de Sanford Meisner y trabajó en teatro de Broadway.

Su debut profesional se produjo con un pequeño papel en la obra musical de Shakespeare Los dos hidalgos de Verona. Tras actuar en varias producciones de Broadway, fue descubierto por el director Robert Altman, quien le ofreció papeles a mediados de los setenta en California Split (1974) y Nashville (1975). Su debut en el cine fue interpretando a un maleante en Death Wish (1974). A partir de entonces, Goldblum se destacó en la gran pantalla, protagonizando películas icónicas como la película de terror La mosca (1986), Parque Jurásico (1993), Independence Day (1996), y sus secuelas El mundo perdido (1997) y Jurassic World: el reino caído (2018).

Además de su exitosa carrera como actor, que incluye una nominación a los Premios Óscar en 1996 por dirigir el cortometraje Little Surprises, Goldblum es un talentoso músico. Es un habilidoso pianista de jazz y ha declarado que, de no haber sido actor, se habría dedicado profesionalmente a la música. En la televisión, también tuvo un papel destacado interpretando al detective Zach Nichols en la serie Law & Order: Criminal Intent entre 2009 y 2010.